Hablemos primero de la organización. Un desastre, pero vayamos por pasos con esto. En el momento en que me planteé ir al festival, allá por abril sería, pensaba... habrá que reservar entradas o algo. Nada más lejos de la realidad, en éste festival no tienen una previsión muy acertada y hasta dos semanas antes del mismo ni siquiera anuncian el cartel de películas que van a proyectar. Dicha tardanza hace imposible siquiera plantearse un posible calendario de acción, y menos aún plantearse un horario consistente sobre las peliculas que deseas ver.
La compra de entradas es otro lastre. Empecemos con los bonos que ofrecen:
-Uno para entrar en la sala grande, más cara que comprarse todas las peliculas que vas a ver y además te inhabilita para ver otras que puede que tengan mayor interés personal (como The Forbidden Door).
-Otro para peliculas matinales, en la misma sala. Con el mismo inconveniente que la anterior, y con el añadido de que por las mañanas, excepto en fines de semana, pocas cosas interesantes ponian.
Por si fuera poco, cada película costaba no menos de 8 € (sin descuentos, con descuento de 20% serían 6'40 € ), haciendo que en vez de un festival pareciera que fueras al cine de tu localidad, ya que por lo general, solo ofrecían eso. La película y nada más. A éste precio desmesurado, el cual, al ser un festival, debería ser bastante inferior a la media nacional en sala, se le sumaban las comisiones que luego podrian cobrar los bancos metidos en el ajo. Veanse 0'90 € por entrada por internet, 1,50 € por teléfono, y 2 € si ibas directamente a las oficinas de Caixa de Cataluña. A estos precios, además, se le podía añadir 2 € si querias entrar en una butaca central. Por lo que ver una película podia costarte tranquilamente 12 €. No, yo soy de los de 6'40 € y ya es mucho.
Si ya con esta lista de precios no habian conseguido asustar aun al pobre visitante, lo bueno era ir a comprar las propias entradas en taquilla. Si señor. Una profesionalidad, un saber hacer, una gran calculadora de toda la vida para calcular cuanto me cuestan mis entradas... Si señores, el festival de sitges no tenia programa propio para calcular ni siquiera los descuentos que ibas a tener. Todo a la vieja usanza, que no se diga que se pierden las tradiciones. Y si te olvidabas decirles que habias cogido mas de x peliculas, te quedabas sin el x de descuento... un pico extra vamos, por que la entrada ya habia sido impresa y era irrevocable. Eso sin contar con esas hojas de papel que colgaban esporádicamente y sin avisar al lado de las taquillas anunciando que tal o cual pelicula se habia quedado sin entradas oficialmente, trastocando por completo cualquier agenda que pudieras haber improvisado para llevar bien el festival. Esto me pasó con La Horde, ZombieLand y Imaginarium... películas las cuales al pasar unos dias resultó que si que habian entradas y pude verlas, pero que ya me habían trastocado el planning.
Puede que se piense que exagero con decir que la organización era un desastre. Bueno, hasta ahora solo he tocado el tema de las entradas prácticamente. Vamos a cosas más acordes al espiritu de una buena organización: Las localidades. Sitges es una ciudad pequeña en verdad. Muchas cuestas, pero pequeña. A pesar de eso, entre los apartamentos donde estabamos, y por lo que pude comprobar, donde estaban la mayoria del personal, y la Sala principal hay como unos 25-30 minutos andando. En medio de eso está el centro de la ciudad, en donde entre sus calles pueden encontrar las otras dos salas de cine vinculadas con el festival. Yo fui al festival con gente que ya habia estado, pero veo el punto de vista del novel que entra en la ciudad y se pregunta.. ¿donde se celebrará esto? Ni un cartel indicador, ni una pista de por donde tienes que ir. Ni un misero transporte que te lleve al festival. ¡Que minimo que contratar 4 o 5 autobuses para que recorran regularmente la zona meliá-apartamentos, ya no solo por respeto a los asistentes al festival, sino más también por la gente que, como yo esos dias, puedan tener algun problema para trasladarse a pie todos los dias.
Luego pasamos a las localidades: Pequeñas, minusculas, viejas y rancias. Vamos, las salas del centro de Sitges necesitan un reformado completo de arriba a abajo.. o otro edificio mas adecuado vamos. De la grande de Meliá, solo tengo dos quejas. Asientos sueltos y falta de espacio entre espectadores. Para ser la sala de ceremonias parece más bien que pusieran cuantos más asientos mejor sin importar la calidad de los asientos ni la comodidad del espectador, siendo especialmente sangrante si te toca ver la pelicula en uno de los extremos de la sala, casi viendolo todo de lado y sin poder leer los subtitulos.
Otros grandes fallos de las ceremonias:
-Que dejaran hablar al director de Sitges, Angel Salas, el cual, pobre de el, intentando hablar en catalán daba cada zapatazo que más de uno se empezaba a descojonar, oyendose incluso aplausos y gritos cuando paraba de hablar sólo por la vergüenza ajena que llegaba a producir.
-Cuando llamaban a los directores, actores, ... al escenario, pues como que faltaba algo. En 42 ediciones digo yo que habrían podido componer algun tipo de tonada propia para poner en situaciones así, y no un mudo silencio consiguiendo poner nervioso al más tranquilo. No quiero ni imaginar lo que podrian sentir esa gente al ir pasillo abajo sin ningun tipo de acompañamiento, entre toda la gente.
Si bien, lo que más me ha molestado es la falta de actividades. Si, habian debates, cursos, entrevistas,... pero al ritmo de "1 al dia", y es que nisiquiera lo anunciaban en el programa que te daban. O lo habias visto por internet, o no te enterabas de nada. Lo suyo es que hubieran habido charlas diversas a lo largo de cada dia, que estuvieran bien programadas en el propio programa, y que hubieran otro tipo de actividades adicionales. Una zombie-walk no es suficiente para decir que se hacia algo mas que ver peliculas. Por ejemplo, podrian haber rodado un corto en vivo con gente interesada en el festival, cursos de narrativa, o simplemente algun tipo de gimcama con premio. Pero no, solo existía la zombie Walk y 4 cursos de los que casi nadie se enteró.
Para más inri, si alguien ha ido al festival sabrá de una cuarta sala. La sala desde donde salia la Zombie Walk. La sala Brigadoon. Pues parece ser que las actividades que se realizaban en esa sala no eran de interes tampoco para el programa informativo del festival, ya que era de visionado gratuito. Y en algunos casos me arrepiento no haberlo sabido para haber ido a otras proyecciones mucho más acordes con mis gustos.
Dicho esto, creo que ha quedado clara mi postura sobre la organización del festival, eso sin contar que conseguí colarme en una sesion sin entrada y podria haberlo echo en varias (seguridad un poco atolondrada). En mi humilde opinión, éste festival, a parte del interés que pueda despertar, se ha convertido en un mero sacadineros de "La Caixa de Catalunya" y "Hoteles Melia", quedando al margen cualquier idea extra que pudiera tener la organización original.
Cagonlaos. El añoq eu viene vamos y los degollamos a todos,a sí les damos festival
ResponderEliminarAbraceteeess