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martes, 27 de mayo de 2008

De Sangre y Bebés

Lo que puede hacer un título. Seguramente muchos piensen que voy a hablar de cosas raras, películas o sacrificios humanos. Nada más lejos ;)



Pues el miercoles pasado, nada más salir del trabajo, me decidí por hacer mi visita rudimentaria de donación de sangre. Visto que en Madrid hay un sitio fijo bastante popular (Sol), y ya habiendo estado allí, me decidí a volver al mismo autobús, donde tan bien me trataron la última vez.

Eran las siete pasadas de la tarde cuando llegué, y ante mí vi la cola de entrada al autobús, compuesta, para mi sorpresa, de gente de instituto en su mayoria. ¿porque me sorprendí? Supongo que no puedo ver a la gente en la edad del pavo siendo tan solidaria. Es inconcebible. Opuesto a los principios egoistas de esa etapa. Que un porcentaje pequeño sea solidaria puede ser normal. Un porcentaje alto ya asusta. Luego descubrí que estaban en la plaza por la huelga de profesores, cosa que equilibraba un poco el karma mundial. No hubieran venido de otra forma.

Tuve que esperar unos 20 minutos antes de poder rellenar el formulario inicial para la donación. Y luego 20 más antes de que me dejaran donar própiamente. Mientras esperabamos, una española afincada en francia, flipaba con, según ella, la falta de higiene en las donaciones. Era su primera vez en España, pero según decía era habitual desde hacia unos añitos. 21 tenía. A la pobre, tengo que reconocer, que la machaqué un poco por el tema, cosa que me arrepiento, pero nose, es una de esas cosas que te salen sin más. Y empecé a preguntarle si quería un centro de esterilización para donar sangre. Aunque es verdad que si que pienso que no se necesita más para donar. Está todo bastante limpio cuando te toca siempre.

Cuando me tocó, como siempre, tardaron como unos 10 minutos más en encontrarme la vena (creo que tengo un brazo de goma, no noté para nada la aguja :D) y otros 10 minutos donar sangre, con una de las enfermeras con el dedo en mi brazo para que fluctuara. La situación era de lo más surrealista hasta el momento en que entró una adorable viejecita. En ese momento se volvió todo más confuso aún. Eramos cuatro donantes, tres enfermeros(una sujetándome el brazo) y una ancianita que empezó a abrazarnos, a darnos las gracias y le faltó poco para que nos nombrara sus herederos. La mujer en realidad sólo quería agradecer en general las donaciones que la habían salvado en una operación a muerte, pero claro, las formas eran como para echar a correr...

Nada más salir, bendito de mí, me fuí directamente al corte ingles a por un recado prenatal (Hola mary XD) Lo que me costó encontrar la sección de bebes en el corte ingles no tiene nombre. No sabían ni en qué edificio estaba de los tres que hay en sol.

En cuanto llegué a la sección en cuestión, me fui directo a pedir el producto que me habían encargado. No soy de ir perdiendo el tiempo de compras. Y bueno, pasó lo que pasó. De la camisa negra que llevaba se había soltado el esparadrapo que me habían puesto y calló delante de una mujer que iba con su bebé en los brazos. La pobre, al ver la sangre coagulada de la venda, no se lo que se imaginó, pero se asustó, reculó y cayó de bruces cual larga era en el pasillo.

Por suerte no pasó nada grave, pero el susto que se dió la mujer, verla ahí tendida en tierra con un momntón de carritos de bebés alrededor, con un bebé en los brazos, y una dependienta intentando coger al bebé para que ella pudiera levantarse, se me antojó una escena muy cómica.

Claro la mujer no lo vió así y se fue con un enfado de narices. Pero ¿que quereis que os diga? No pude evitar reirme :).

3 comentarios:

  1. imaginarse la situacion no tiene desperdicio, digna de pelicula de humor XD

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  2. Aysss, JB!!! Que recuerdos....no se porque me ha venido en mente nuestra peripecia hacia el Teatro Calderon en Madrid!!
    jejejeje!!! Estas cosas solos nos pasan nosotros!!! jijijijiji

    :)

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  3. Y que lo digas, y que lo digas :_)

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